ella, el alcohol y el intento de una canción

+alice suelta ya esa copa- dijo él intentando apartarme de mi fiel compañera
-vete, no necesito ayuda! VETE!
cerrando la puerta de mi cuarto de composición me dejó sola.
aspiré el aire que me envolvía, sueños, tinta y whisky
de un trago me acabé la copa que tenía entre mis manos, ¿por qué mi novio intentaba apartarme del dulce sabor de la bebida? ¿era mi novio?
me reí, aunque no sabía porqué supongo que tenía ganas de reir
las cuatro paredes que me rodeaban se me antojaban fuertes e indestructibles, pero yo quería derribarlas, estaban limitando mi creatividad.
Me levanté del piano y las golpeé, una y otra vez.
Las lágrimas empezaron a rodar por mis mejillas
-¿NO ESTOY LOCA VALE? SÉ CONTROLAR MIS EMOCIONES, SÉ CONTROLARME Y PUEDO HACER LO QUE QUIERA.
ni tan siquiera sé por qué dije eso, simplemente salió de dentro...
salió de dentro
LA CANCIÓN!
tenía que ponerme a escribir o perdería mi oportunidad
Esta vez ni tan siquiera llené la copa, cogí la botella y en mis labios la vacié.
El agrio sabor del whisky qemó la poca creatividad que me quedaba, pero tenía que sentarme delante del papel a plasmar todo lo que sentía o más bien lo que ya había dejado de sentir.
Tomé la pluma pero sentí que se deshacía entre mis dedos.
derramé otra lágrima, por qué me pasaba esto a mí???
sentí que me quería morir
¿en qué estaba pensando?
por qué lo estaba pensando?
no podía rendirme!
PERO RENDIRME DE QUÉ!!!!
no me acoraba de nada, de quien estaba escribiendo, estaba escribiendo sobre alguien?
me quise deshacer en aquel mismo momento, las piernas me temblaban, la habitación se parecía inundar de ideas que ni tan siquiera habían nacido.
Me rodeaba la inseguridad, el miedo y la falta de inspiracion que me habían llevado a empezar a beber, pero el alcohol no tenía la culpa de nada!! no le iba a dar la razón a él, a él? quien era...
no quiero dejar esto...
soy joven...
puedo con todo...
puedo acabar la canción...
podría escribir mil canciones ahora mismo si quisiera....
no me iba a caer...
pero los párpados me pesaban
la gravedad me venció...
y caí, a la mañana siguiente me encontraría mi novio, él me quería, sabía lo que iba a pasar... al día siguiente recapacitaría y dejaría de beber, pero eso lo dejaba para el día siguiente...
el futuro para el futuro... mientras tanto el whisky que quedaba en la botella mojaba mi pelo.